La vida se compone de injusticia tras injusticia, sin posibilidad de encontrar una salida firme sin dolor y sin amarguras.
Pues no, cuando quieres darte cuenta tu vida se encuentra en un abismo de oscuridad del que no puedes salir y te atrapará de tal forma que acabarás rindiendo te a sus pies para recobrar el aliento aunque solo sea un segundo de ese dolor eterno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario